Domina tus básicos antes de pensar en suplementos
- 365socialsstudio
- 22 ene
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Un estilo de vida saludable comienza con los fundamentos. Antes de recurrir a suplementos, asegúrate de tener estos aspectos bajo control.

En el camino hacia una vida más saludable, es fácil caer en la tentación de buscar atajos, como suplementos o dietas milagrosas. Pero la realidad es que nada supera a un estilo de vida basado en hábitos sólidos. Antes de pensar en suplementos o estrategias avanzadas, asegúrate de que tus bases estén completamente dominadas. Aquí te explicamos cómo hacerlo.
1. Dormir bien
El sueño no solo es un momento de descanso, sino el pilar de tu salud. Dormir entre 7 y 8 horas cada noche, con una rutina consistente, ayuda a tu cuerpo a recuperarse, a regular las hormonas y a fortalecer el sistema inmunológico. Más importante aún, la calidad del sueño es tan esencial como la cantidad. Procura crear un ambiente propicio: sin pantallas antes de dormir, con luz tenue y en un horario regular.
2. Hidrátate todos los días
El agua es vida. Cada célula de tu cuerpo depende de la hidratación para funcionar correctamente. Asegúrate de beber al menos 2 litros de agua al día (ajustando según tu nivel de actividad física). Una buena estrategia es tener una botella de agua siempre a la mano y distribuir tu consumo a lo largo del día.
3. Prioriza la proteína
La proteína es fundamental para la regeneración muscular, la producción de enzimas y el buen funcionamiento del sistema inmune. Consume fuentes de calidad, como pollo, pescado, huevos, tofu, lentejas y garbanzos. Calcula tu necesidad proteica según tu peso corporal y nivel de actividad: para personas activas, la recomendación oscila entre 1.2 y 2 gramos por kilo de peso corporal.
4. Energía de carbohidratos y grasas saludables
Los carbohidratos son la principal fuente de energía para tu cuerpo, mientras que las grasas saludables son esenciales para el funcionamiento hormonal y la absorción de vitaminas. Asegúrate de consumir carbohidratos complejos como avena, quinoa y batatas, junto con grasas saludables como aguacate, frutos secos y aceite de oliva.
5. Cinco colores en tu dieta
Las frutas y verduras no solo aportan vitaminas y minerales, sino que también están llenas de antioxidantes que combaten el estrés oxidativo. Intenta incluir tres colores de verduras y dos de frutas cada día. Este arcoíris de alimentos te asegura una variedad de nutrientes esenciales.
Suplementos recomendados
Cuando tengas estos aspectos bajo control, puedes considerar incorporar suplementos. Estos son los más importantes:
Magnesio (glicinato): Ideal para mejorar la calidad del sueño y la recuperación muscular.
Omega 3: Busca una fórmula que contenga al menos 1 gramo de EPA y DHA por ración. Este suplemento ayuda a la salud cardiovascular, la inflamación y el rendimiento cognitivo.
Vitamina D3+K2: La vitamina D3 apoya el sistema inmunológico, mientras que la K2 contribuye a la salud ósea y cardiovascular. Asegúrate de realizar un análisis antes de suplementar.
B12 y hierro: Es crucial mantener tus niveles en orden. Realiza chequeos regulares y sigue las dosis recomendadas por tu médico.
Recuerda: La base de un cuerpo y mente saludables está en los hábitos diarios. Los suplementos son un apoyo, no un sustituto de un estilo de vida equilibrado.



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